PARALELISMOS

Las cosas no son eternas, pero hay algunas que tienden a serlo. Todo lo que merece la pena se cuelga una etiqueta de las que les hace no jugar a ponerse precios de ningún tipo, sobra el dinero.

Se crean pactos tan fuertes como el que ya creó hace tiempo la luna con la noche, son los eclipses nuestros miedos. Los castillos son nuestras fortalezas, los fosos la distancia. Pero si se crearon estrategias para saltar y atacar ese castillo, mejores se crearán para amarlo.

Hoy no recuerdo ningún día sin noche, ni castillo sin princesa.

La dificultad hace a las cosas más apetecibles, cuando era niño sino lloraba no quería ningún juguete. Si te lo compraban fácil lo guardabas a los tres (muchos son) días, si tenías que llorar por él jugabas solo para que tu madre no te riñese, ¡o me vas a decir que eso también es mentira!...Llorar siempre fue demasiado fácil.

El castillo estaba lejos, pero lo importante es que allí estaba la princesa. El camino era arduo, pero allí estaba la princesa. Y cuando fui una noche, no veía la luna, pero imaginaos quién estaba allí.

¡Sorpresa!

Es fácil sorprender a la gran mayoría de las personas… pero hoy quise sorprenderme a mi mismo…y aún no se cómo hacerlo.