jueves, 5 de noviembre de 2009

Rencuentro con mis ganas...

La distancia tubo el gesto de dejarnos un rato a solas, la cordura se puso en huelga y decidió que la arrastrasen las horas, la pasión una canción de la que ahora no recuerdo su son, decidí olvidarlo para ahora poder estar vivo.

Dale las llaves a la noche y que ella se encargue de vigilar, me recogí en lo mas mediocre de mi alma y saqué las palabras que tanto duelen recordar a la parte de mi que le importan los pequeños detalles.

Pongo fuerza en los colores más apagados a sabiendas que no se van a encender, los colores más vivos son los que a veces hacen que los grises parezcan negros, ocultemos la realidad y hagamos de esto un deporte nacional.
Crítica destructiva como forma de vida pero dale un poco de rima y ponle el ritmo de la poesía, que no se pierda la magia.

¿De qué sirven las declaraciones de principios cuando la mayoría las hacen al final de sus días?.
. Y yo te invito al café, pero tú pones el azúcar.
Me reencontré con mis ganas y hoy no les di la espalda.