viernes, 3 de junio de 2011

Parole, parole, parole...

Todas las frases quieren decir algo: algunas te lo dicen bajito, al oído, como sin pretender hacer más ruido que el de tu corazón al estrujarse… Otras quieren sonar tan fuerte que casi ni se dejan escuchar… Otras, como quizás sean estas, son tan ilusas que creen que pueden llegar a ser importantes para algún/a despistad@ … Otras son indiferentes, algunas serán recordadas en los momentos más importantes, … Son tantas las frases…

Ya no me quedan frases para definirte…tendré que inventármelas.

Pero las frases nunca vienen solas, bueno a veces sí, y es entonces cuando caemos en el desastre de la apatía, (¡pobres palabras!) , qué son de las palabras sin unos ojos que las miren y sin unos labios que las digan y, es más, me atrevo a decir que qué son de mil millones de palabras perfectamente encadenadas si no son emocionadas, respaldadas, incluso vigiladas por otros mil millones de gestos.

Las palabras, a secas, nunca llegarán a mojar los ojos.

Pero las palabras por si solas e incluso acompañadas por los gestos, no son entendibles para todo el mundo. No todos hablamos el mismo idioma y los que lo hablamos no queremos entendernos. Algún día lo haremos, creedme que lo haremos, mientras tanto tendremos que conformarnos con hablar entre los que nos queramos entender.

No da lo mismo quién haga que su garganta se desgañite, quién use la fuerza de sus manos para escribir o adulce su voz para ponerte los pelos de punta, si tan importantes son las palabras más aún son sus dueños.

Quien inventó las rosas, inventó las espinas…quien inventó las palabras, inventó las heridas.

Cuando tengamos esto: mensaje, canal, emisor y receptor, “tan solo” nos queda algo que muchos obvian, que debajo de las vías justo cuando pasa un tren no nos oirán NUNCA, cuida el momento y cuida el lugar, (cuánto debe mi timidez a esto).
Acabo, si me lo permiten y si no también, que para algo es este mi blog y estas son mis palabras dando un consejo: HABLEN, con palabras, con los ojos, con los brazos, bajo la luna, bajo el agua sin miedo a ahogarse; que lo de esclavo de tus palabras y dueño de tus silencios es de cobardes, hablar, siempre, con relajación, con pasión , con amor.

Quizás abuso de los puntos suspensivos…o quizás me quedo sin aire…sin palabras.
Y sólo hoy y sin que sirva de precedente…

http://www.youtube.com/watch?v=ItokDt3Zyk0&feature=fvst